La temporada aragonesa se cierra con buen ganado de Los Maños y el triunfo de los soñadores de gloria
Encontrar una placita de toros casi llena a la orilla del Ebro, aguas arriba de la capital aragonesa, en el pueblo de Sobradiel, en una soleada mañana de noviembre, fue poco menos que un milagro, que se fue acrecentando y confirmando a la vez que cuatro chavales plenos de ilusiones y sueños de gloria iban calando con sus triunfos en el buen ánimo de los aficionados.
La Escuela Taurina Oscense sumó una clase práctica más a las que ha organizado a lo largo de la temporada en la propia Huesca y en en otras plazas aragonesas. Sus mentores, el matador de toros Ricardo Aguín ‘El Molinero’ y el subalterno Pablo Ciprés, estaban seguros que sus pupilos, y los invitados de
Puerta grande
Al final del festejo, Jorge Mallén, Aarón Palacio, Ignacio Boné y Borja Navarro se fueron por la puerta grande tras desorejar a sus oponentes y desarrollar cualidades y conceptos diferentes. Mallén y Boné, de la Escuela Oscense, demostraron sobre la arena una excelente mano izquierda, el primero, y gran firmeza el segundo. Facilidad, valor y las ideas muy claras, Aarón Palacio, de la escuela aragonesa Mar de Nubes, que dirige Miguel Cuartero, y variedad de Borja Navarro, de la Escuela Taurina de Valencia, de la mano de Víctor Manuel Blázquez.
El festejo fue el último de la temporada en tierras aragonesas, que ante las escasas corridas de toros que han acogido sus plazas, cerradas por la pandemia, ha tenido en las clases prácticas para alumnos de las escuelas taurinas un aliciente para los aficionados y una ilusión ante el futuro.