Madrid: Un Concurso de Cabezas y un Grandísimo Toro de Pedraza de Yeltes

0
606

Gómez del Pilar rozó la oreja del sexto, Serafín Marín dejó naturales de mucho calado al primero y Rubén Pinar se encontró con el lote de menos posibilidades de un fiasco de concurso.

Redacción: Marco Antonio Hierro – Cultoro.es – Web Aliada – Foto: Luis Sánchez-Olmedo

Madrid – España. A las seis en punto de la tarde trenzaban el paseíllo en la Monumental plaza de toros de Las Ventas los diestros Serafín Marín, Rubén Pinar y Gómez del Pilar. Una terna que estaba anunciada en una corrida concurso de ganaderías para poner el broche a los festejos toristas dle mes de septiembre. Un festejo donde se anunciaban astados de Partido de Resina, Samuel Flores, Victoriano del Río, Peñajara, José Escolar y Pedraza de Yeltes, seis ganaderías muy del gusto del aficionado venteño.

Naturales al ralentí de Serafín Marín con un primero de Partido de Resina sin fuelle

Tuvo trapío y mucha plaza el de Partido de Resina que abrió la concurso, pero después de las verónicas y la media de Serafín Marín ya no era nadie. Se dejó pegar en varas para cumplir el expediente y luego tuvo cierta clase sin fuelle en el pitón izquierdo. Por allí lo aprovechó Serafín, que derramó un puñado de naturales al ralentí que tuvieron ussía, pero no hubo más dentro del animal. Le pegó una estocada hasta las cintas de rápido efecto que le sirvió para escuchar palmas, al menos, con un toro pitado en el arrastre.

El mulo de Samuel deja sin opciones a Pinar en el segundo acto

El segundo, de Samuel Flores, tenía dos soberanos pitones por delante y el lomo largo y recto, pero era una tabla visto por detrás, y por eso fue protestado. Ni tuvo empleo en el saludo que no existió de Rubén Pinar ni en el caballo, donde no se comportó como debe un toro en un concurso. Tampoco en la muleta, donde embistió con el pitón cambiado, manoseando y a oleadas que no dejaban ni colocar a un Pinar que no tuvo opción alguna de hacer el toreo. Dejó, eso sí, una estocada extraordinaria que no le sirvió para pasar del silencio.

La faena entonada de Gómez del Pilar al Victoriano se deja el premio en la espada

El tercero, de Victoriano del Río, tenía más pinta de Atanasio que de Domecq, y se le fue por dentro a Gómez del Pilar cuando lo saludaba, arrruinando el recibo. Le faltó fuerza en el caballo, donde no fue la mejor la actuación de Pepe Aguado, que lo recibió dos veces, pero le dejó cuatro agujeros. Y lo protestaron, lógicamente. Pero le metió bien la cara en la muleta en el inicio a Noe, que supo ir dosificándolo para que durase más. Siempre entregado, pero siempre al ataque, esperó al epílogo para dejar un manojo de naturales de mucho calado, manteniendo siempre en alto el nivel de la faena. Tiempo siempre, distancia y mucho mimo a la hora de torear a un toro que no se esperaba cuando se anunció en este cartel. Estaba el público con él cuando entró a matar, pero varios pinchazos lo dejaron sin premio.

El de Peñajara se emplea en varas y Serafín se queda sin él en la muleta

La ovación de la tarde se la llevó el cuarto, que fue el lugar que ocupó el de Peñajara, que tuvo empleo y tuvo importancia en la embestida en el saludo de tres verónicas y media de Serafín Marín. También en el caballo se arrancó pronto en el primer puyazo y fue con alegría para empujar. Le costó más en el segundo, porque no le encontraba el sitio Antonio Peralta, y fue Serafín quien dirigió magníficamente el tercio. Y la gente despidió en pie al picador, después de que fuera el matador el que corrigiese su actuación. En banderillas se desmonteraron Marcos Prieto y Diego Valladar antes de que Serafín brindase al público. Pero ya se había quedado el toro en el caballo y le bajó la persiana muy pronto al catalán, que puso todo de su parte para que se arrancase un toro que corrió, por momentos, el riesgo de echarse, acusando el tiempo en el caballo. Seguro con la espada, se amorcilló el toro, sin embargo, y terminó escuchando palmas.

El de Escolar termina parado y Rubén Pinar en silencio en el quinto acto

El de José Escolar que hizo quinto, bajo, musculado, bien hecho y en el tipo de su estirpe, se protestó por su falta de espectacularidad. Remiso en el capote de Rubén Pinar, cumplió dos veces en varas, con el primer puyazo rectificado y puso a los banderilleros en apuros tirando arreones. Seis pasadas para dejar cuatro banderillas. Con la muleta logró naturales de cierta categoría el albaceteño mientras le duraron al cárdeno las ganas de caminar. Pero había que dejársela puesta para que no parase, y si lo hacía Rubén quedaba demasiado ligero. Así que se lo quitó de en medio con brevedad y escuchó silencio.

Gómez del Pilar saluda una ovación con el gran sexto tras la petición de oreja

El de Pedraza que salió sexto, toro por todas partes, repitió las embestidas en el saludo a la verónica solvente de Gómez del Pilar, pero embistió con el pitón cambiado y sin demasiada humillación. Soberbio fue el primer puyazo de Juan Manuel Sangüesa, con el toro metiendo los riñones con bravura y recarga. También en el segundo encuentro, pero ya estaba el toro muy mermado y optó el palco -que no el matador- por cambiar el tercio. Al público brindó Noé mientras tenían la mala educación de protestar al presidente mientras lo hacía. Por eso se echó de rodillas y le pegó la serie más redonda, reunida y asentada de toda la tarde. Enclasado el de Pedraza, que se fue a la muleta en la distancia y lo embarcó con precisión para aprovechar las arrancadas de bravo del colorao. Pero se le vino un poco abajo la faena cuando la tomó con la zurda, porque exigió el toro más que él y hubo una falta de entendimiento que no logró remontar después. Pareció buena la estocada, pero la escupió el de Pedraza, que terminó siendo el toro de la corrida. Acertó con el descabello y le pidieron una oreja que no se concedió. El toro se fue con una atronadora ovación y el presidente con una bronca.

Ficha del Festejo:

Plaza de toros de Las Ventas. Corrida concurso de ganaderías. 8.045 espectadores en los tendidos. Toros de Partido de Resina, Samuel Flores, Victoriano del Río, Peñajara, José Escolar y Pedraza de Yeltes. De clase sin importancia el feble primero, pitado en el arrastre; mansurrón y vacío el segundo, pitado; de buen aire en la embestida el tercero, ovacionado en el arrastre; de alegre viaje y humillada intención el cuarto, al que mataron en el caballo; de humillación sin franqueza el quinto, ovacionado; bravo y alegre el buen sexto. Serafín Marín: Palmas y Palmas. Rubén Pinar: Silencio y Silencio. Gómez del Pilar: Ovación tras aviso y Ovación tras aviso. Incidencias:Mejor toro: ‘Sombrerero’ de Pedraza de Yeltes, lidiado en sexto lugar por Gómez del Pilar. –Mejor picador: Antonio Peralta de la cuadrilla de Serafín Marín, picó al cuarto de la tarde del hierro de Peñajara. –Mejor lidiador: Desierto

Dejar respuesta