Morante de la Puebla fue ovacionado, Cayetano cortó dos orejas a su primero y Roca Rey se fue con tres en el esportón del encierro. Hubo un lleno de no hay localidades.
Redacción: Emilio Trigo – Cultoro.es – Web aliada – Foto: Arjona
Ronda – España. La tradicional Corrida Goyesca de Ronda se celebraba en la tarde de este sábado en la Real Maestranza malagueña. A las cinco y media de la tarde arrancaba un paseíllo conformado por Morante de la Puebla, Cayetano y Roca Rey. Se lidiaban toros de Juan Pedro Domecq y Toros de Parladé.
La Goyesca estuvo marcada por algunas cosas. Primero el retraso en su comienzo con casi media hora en su arranque. Después los sobresaltos a toda la terna -los tres fueron volteados- y los mismos, tiraron de raza para imponerse a una corrida muy torera de hechuras pero con ciertas cositas. Otro aspecto, es que el público no estuvo tan cálido como otras veces y por último, el presidente restó el rabo a Roca Rey. En resumen, tarde de raza de una terna que ayudó mucho a la corrida y le tapó bastantes apuntes.
Roca Rey cortó tres orejas a su lote. Cayetano que se infiltró antes del comienzo del festejo cortó dos al segundo. Importante esfuerzo de Cayetano Rivera por reaparecer en Ronda. Morante fue ovacionado en ambos, tras dos faenas de perlas toreras. Corrida de Juan Pedro Domecq, interesante pero con teclas. Destacaron los enclasados corridos en segundo y tercer lugar.
Morante recibió al bonito primero con un ramillete de verónicas con mucha torería. Varias verónicas de corte antiguo y una media de gran sabor. ‘Lamioso’ metió riñones en el peto y empujó con fijeza en la única vara que recibió. Morante tras el oportuno permiso al usía, comenzó por estatuarios y hasta cinco le endosó de forma encadenada y una trincherilla de cartel. En la segunda tanda, el toro le tropezó con los cuartos y se produjo un susto mayúsculo, cuando el de La Puebla se quedó debajo de los pitones del abreplaza. El Juan Pedro lo tuvo a merced pero desarrolló mucha nobleza y no hizo por él en unos instantes muy angustiosos. José Antonio le corrigió a su antagonista el defecto de venir metido por dentro y construyó una faena llena de matices y torería. Cuajó tandas con mucho gusto y temple por ambos pitones, aunque destacaron los naturales de mucha naturalidad. Toreó con elegancia al paso con detalles de prestancia añeja. Pinchó varias veces y perdió la oreja. Ovación. El cuarto pareció tener el defecto de la vista cruzada. ‘Chulito’ hizo cosas feas en su acometida, tanto en el capote, cómo en la muleta. Un toro sin ritmo, agrio que miraba antes de embestir y que después iba sin clase. Un astado al que Morante fue haciendo poco a poco y al que tragó varios empujes que le hicieron rectificar su embroque. El cigarrero soltó esas perlas que le marcan en su personalidad e impregnó el coso maestrante de belleza plástica. Se lo pasó muy cerca –con ese valor que casi nadie percibe y muy pocos poseen- con una embestida andarina y sin ir metido en las telas. El Cigarrero le extrajo algunos contados pero de gran plasticidad. Se los inventó sin que nadie los presagiara tras su afanosa faena. Persistente e ilusionado a pesar de no tener material para el triunfo. Estocada y ovación tras petición.
El segundo ‘Mirtolo’ otro astado muy torero y bien presentado. Un Juan Pedro, después de lo visto, muy dulce y enclasado. Astado que todo lo hizo bien -aunque por poner un pero le faltó un poco más de poder- el segundo, se abría por fuera en cada embestida y se revolvía colocando la cara para el siguiente con celo y entrega. Cayetano disfrutó y se gustó en una faena plena de temple y empaque, donde la gallardía fueron sus finales con preciosos adornos muy toreros. El menor de los Rivera cuajó una obra de gran diapasón, donde también hizo uso de la variedad de su tauromaquia, con un final hermosísimo desde el centro del ruedo hasta el tercio. Espadazo recibiendo y dos orejas de peso. El quinto ‘Marisquero’ un toro que embistió con prontitud en los primeros tercios pero después en el último cambio y sacó chiribitas. Cayetano, tiró ante este de raza para construir una faena de poder. El rondeño tuvo delante un oponente informal de poca clase, al que aguantó sin enmendarse derrotes al cuerpo. Uno de ellos estuvo a punto de costarle un ‘tarantón’ fuerte pero se libró. Cayetano le puso todo lo que le faltó a su antagonista y además imprimió su elegancia en series muy despacitas. Ovación para un Cayetano poderoso y entregado.
Lo tanteó Roca con el capote y no hubo saludo vistoso puesto que el tercero ‘Revistero’ no se prestó al ello. Sin embargo, el quite fue de gran empaque y variedad, donde el capote voló al son de su capacidad. Brindó Andrés el toro de su debut en la Goyesca al respetable y le formó un lío grande. Roca se amontonó con su oponente que terminó sucumbido a tanto poder. El peruano le tocó las teclas a un toro que fue obediente, pero que tiraba una cornadita en cada sincero embroque -le echó mano propinándole una tremenda paliza- por el pitón izquierdo. Andrés le consistió y le obligó en el viaje exigente, muy por abajo y largo. Se hizo el dueño de una embestida encastada a base de firmeza y buen trazo ligado. Las bernadinas finales fueron de quitar el hipo cambiando el viaje en el último segundo. Puñetazo con la espada y dos orejas incontestables con petición de rabo. El cierraplaza fue el sobrero ‘Matamoscas’ del hierro titular. Improvisó Roca Rey en el recibo y el quite. En ambos espacios de la lidia con el percal, fue fiel a su personalidad, con tremenda firmeza y capacidad. Y así, se mostró Roca ante uno que se desplazó soltando la cara por su falta de empuje y clase, aunque terminó entregado al impecable planteamiento del peruano. Andrés le enseñó el poder de su muleta y le condujo el viaje presentándole la pañosa de abajo a arriba, puesto que el sexto, ayudaba más de esa forma en el inicio de labor. Después de mitad de faena hacia delante, una vez ahormado, le cambió el planteamiento y fue de arriba abajo, para terminar aglutinado encima de su oponente. Media en buen sitio y oreja para una faena apabullante.
Ficha del Festejo
Plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Ronda (Málaga). Segunda de la feria de Pedro Romero. Corrida de toros. Entrada: “No hay localidades”. Toros de Juan Pedro Domecq y Toros de Parladé. Bien presentados, de buenas hechuras e interesantes de juego pero con teclas. Destacaron los enclasados corridos en segundo y tercer lugar. Morante de la Puebla; Ovación y Ovación. Cayetano; Dos orejas y Ovación tras aviso. Roca Rey; Dos orejas tras aviso y Oreja. Cuadrillas: Saludaron en banderillas Francisco Durán ‘Viruta’ Iván García, Alberto Zayas, Juan José Domínguez y Paco Algaba. Incidencias: El festejo comenzó con veinticinco minutos de retraso por ser atendido Cayetano en la enfermería.