Éxitos Taurinos en Villapinzón y Pesca

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Redacción: Héctor Esnéver Garzón Mora – Enelcallejon.webnode.es – Web Aliada

En estas dos localidades de la región cundiboyacense se tuvieron ejemplares con movilidad y bravura permitiendo triunfos a los actuantes, además, de nutrida asistencia en los tendidos de cada coso taurino.

Ubaté – Colombia. Dos festejos taurinos se realizaron este domingo cuatro de diciembre en la zona centro de nuestra querida Colombia, mas exactamente en el altiplano cundiboyacense, donde por fortuna sigue afianzada la tradición y el amor a la liturgia del toro bravo.

El festejo de orden mayor se realizó en la ciudad cundinamarquesa de Villapinzón, ciudad fundada por Don Francisco de Vargas Figueroa en 1764, con el nombre de Hato viejo, a orillas de la quebrada -La Quincha-, y que en los primeros años del siglo XX por ordenanza de la Asamblea de Cundinamarca, tomó el nombre con el que la conocemos actualmente. Allí en tarde agradable se lidiaron ejemplares de las ganaderías San Rafael de la Merced y Altagracia, que tuvieron en su gran mayoría condiciones para el ejercicio taurino. Actuaron los Matadores de Toros Sebastián Vargas y José Luis Angelino, acompañados del Caballero Rejoneador Don Mauro Andrés Rozo, quienes en la medida de sus facultades y ofertas de los oponentes hilvanaron faenas memorables en cada una de sus comparecencias.

Sebastián Vargas tuvo cara y cruz en su lote, con el primero porfió, lo dio todo y solventó la papeleta, infortunadamente el oponente poco aportó. En el segundo vio como el astado vino a mas, se movió, ayudo a la actuación del cucuteño, el de Altagracia trasmitió tanto que la parroquia solicitó el indulto (perdonar la muerte) que fue concedida por la presidencia del festejo. Indultado el ejemplar y dos orejas simbólicas al actuante.

José Luis Angelino a la postre se llevo el lote de la tarde, dos astados con facultades que aprovecho sustancialmente el Torero mexicano, acondicionó su concepto en todo momento para llevar un agradable espectáculo a los aficionados, variado repertorio. Tres orejas.

Mauro Andrés Rozo, Rejoneador colombiano no pudo tener una triunfal tarde, con el primero de su lote cuajó una buena faena que no concluyó en el paseo de trofeos por estar pesado con la hoja de peral; con el segundo solo hubo muchísima voluntad por parte del actuante, la materia prima no alcanzó para hilvanar una actuación contundente.

También es grato registrar, que en el departamento de Boyacá, más exactamente en la localidad de Pesca (que lengua Chibcha significa «Cercado del padre de fortaleza»), población ubicada en la provincia del Sugamoxi, se realizó el Primer Encuentro Mundial de Escuelas Taurinas, allí se dieron cita varias ganaderías colombianas donde se destacó y obtuvo los grandes reconocimientos la dehesa de Ernesto Gutiérrez propiedad de Don Miguel Gutiérrez. Con referencia a los participantes en el Encuentro Mundial Novilleril, nos cuentan que tuvo una destacada actuación el novillero español Alfonso Ortiz, quien mostró decisión y buen concepto, pero con una relevante comparecencia llena de fundamentales detalles, se convirtió en triunfador de la Novillada Concurso el Colombiano de la escuela taurina de Antioquia.

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