Primera de Toros y Ciudad

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Redacción: Jero

En medio de una tarde fría y brumosa, Manizales dio inicio a la edición número 26 de la Feria Toros y Ciudad, un evento que desde su creación ha sido un espacio para el fomento de la tauromaquia juvenil y la cultura taurina en Colombia. Esta feria, que se celebra cada octubre, nació como una extensión de la tradicional Feria de Manizales —fundada en 1955 e inspirada en la Feria de Abril de Sevilla— y ha servido como plataforma para que jóvenes promesas del toreo den sus primeros pasos en la emblemática Plaza de Toros de la ciudad 9F742443-6C92-4C44-BF58-8F5A7C53B6F1.

Este año, la feria se desarrolla en un contexto especial: es una de las últimas ediciones antes de la entrada en vigor de la ley que prohíbe las corridas de toros en Colombia a partir de 2027 9F742443-6C92-4C44-BF58-8F5A7C53B6F1. Aun así, el espíritu de la fiesta se mantiene vivo, como lo demostraron los seis novilleros que integraron el cartel inaugural.

Juan Simón Londoño: El Regreso del Niño Soñador

Abrió la tarde Juan Simón Londoño, quien debutó en esta misma plaza hace cinco años siendo apenas un niño. Regresó para enfrentar a “Chistorro”, un novillo de 260 kilos de la ganadería Altagracia. Aunque el astado se apagó pronto, Londoño mostró temple y madurez, destacando por su serenidad y buen hacer. Su actuación dejó una grata impresión entre los asistentes, en su mayoría jóvenes, que disfrutaron del calor de su ilusión en una noche fría.

Jarol Sánchez y Carrita: Técnica y Valor

Jarol Sánchez lidió a “Lalo”, un novillo de 304 kilos. Con la capa mostró buenas maneras, y Carrita, en el quite, regaló tres lances de gran pureza. La faena de Sánchez fue limpia y medida, logrando muletazos de mérito incluso cuando el novillo se refugió en las tablas. Una estocada valiente cerró su actuación.

Carrita volvió al ruedo con un novillo más encastado. Brindó al público e inició con pases cambiados por la espalda. Aunque sufrió algunos revolcones, mantuvo el valor. La faena se diluyó con el tiempo, pero cerró con una estocada de buena factura.

Pablo de Alba: El Sueño Interrumpido

Pablo de Alba enfrentó a “Arrogante”, un ejemplar castaño. Su falta de oficio quedó en evidencia y un fuerte revolcón lo llevó a la enfermería. Jarol Sánchez tomó su lugar, pero poco pudo hacer. Un pinchazo y una espada desprendida pusieron fin al ejemplar.

David Ossa: Emoción y Efectismo

David Ossa lidió a “Magnate”, un novillo negro de 302 kilos. Con muchas ganas y menos técnica, brindó al público una faena cargada de emoción. Aunque desordenada, su entrega fue premiada con dos orejas largas. El novillo fue ovacionado con una vuelta al ruedo.

María José: El Debut de la Esperanza

Cerró la jornada María José, una niña de la escuela taurina de Manizales que debutó con traje de luces. Aunque se notó su inexperiencia, mostró valor y amor por el toro. “Majo”, como la vitoreaban desde el tendido, dejó una excelente impresión con algunos muletazos de calidad. Su ilusión promete futuro.

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