La Feria de San Lucas de Jaén vuelve a escena un año más como uno de los últimos capítulos de la temporada taurina a este lado del charco. Tauroemoción, con Alberto García al frente, ha diseñado un abono variado y ambicioso que busca devolver a la plaza el lugar que merece tras varios años donde la gente no acabó de acudir a los tendidos. Serán dos corridas de toros, un festejo en clase práctica y una jornada popular con desencajonada y suelta de vaquillas.

El ciclo arrancó el 5 de octubre con un festejo sin caballos donde se anunciaron seis novilleros ante erales de Antonio Martín Campos. El día 12, la feria toma vuelo con un cartel de altura: Manuel Escribano, Alejandro Talavante y Borja Jiménez -en sustitución de Emilio de Justo-, frente a toros de Jandilla, Juan Pedro Domecq y Garcigrande. El cierre, el 18, llegará con los toros de Victorino Martín para Curro Díaz, El Cid y David Galván.

Como complemento, el día 16 se volverá a celebrar la desencajonada tras varios años sin llevarse a cabo. Su recuperación viene ligada a los toros de Victorino Martín en una tarde donde también habrá una suelta de vaquillas. En plena competencia con ferias como Otoño en Madrid o Misericordia en Zaragoza, la empresa sigue apostando fuerte por una plaza en claro ascenso. Hablamos con Alberto García, director general de Tauroemoción, para conocer más detalles sobre esta feria de 2025 y los objetivos que persigue con ella.

¿Qué valoración hace del equilibrio y la variedad de la feria de este año, y qué papel ha jugado el recuerdo de la corrida de Victorino en la configuración de los carteles de 2025?

Creo que es una feria que tiene variedad y que tiene los ingredientes del gusto de la afición de Jaén. La corrida Victorino dejó en 2024 un gran sabor de boca, para este año buscamos un cartel con tres espadas que han dado golpes en la mesa este año. El del día 12 también está muy rematado.

¿Qué destacaría del cartel del 12 de octubre y del compromiso que han mostrado los toreros anunciados para esa tarde?

El día 12 será el turno para Manuel Escribano, Alejandro Talavante y Borja Jiménez, en el puesto de Emilio de Justo, con toros de Juan Pedro Domecq, Garcigrande y Jandilla. Creemos que son tres toreros con una personalidad muy acusada, espadas que han apostado por anunciarse en Jaén pese a lo tardía de sus fechas, y eso es de agradecer.

¿Por qué considera tan especial el cartel del día 18 y qué aporta la presencia de la corrida de Victorino en esa fecha?

El cartel del día 18 me gusta especialmente. Contamos con tres toreros que han dado sobrados motivos este año para estar en las ferias. Curro Díaz es de esos toreros que a uno personalmente le gusta ver. El Cid ha dejado varias faenas para el recuerdo esta temporada, y Galván es uno de esos espadas que ha alcanzado una regularidad notoria. Como guinda para el pastel se anuncia una corrida de Victorino, hierro por el que esta empresa siempre ha apostado.

¿Cómo valora la inclusión de Manuel Escribano en los carteles y qué mensaje envía su posible presencia tras el percance reciente?

Todo parece indicar que podrá estar tras el percance de hace unos días. Tiene que andar muy fastidiado para que no trence el paseíllo en el coso de La Alameda. También te digo que Manuel se ha ganado por derecho propio meter la cabeza en este tipo de carteles. Es una reivindicación propia. Si no me falla la memoria le hiciste una entrevista hace poco donde hablaba precisamente de eso. Estamos convencidos de que tiene hueco con las figuras, y en ese camino estamos.

¿Qué importancia le da a los festejos populares y a las actividades pensadas para los más jóvenes en esta edición de la feria?

Se apuesta por la juventud: amén de la tradicional clase práctica en colaboración con la Escuela Taurina de Jaén, la novedad viene de la mano del desencajonamiento de la corrida de Victorino, algo que recuperamos en esta edición de 2025. También habrá una suelta de vaquillas. Yo soy un fiel convencido del festejo popular, es un caldo cultivo de futuros aficionados.

¿Qué estrategias han aplicado para hacer más accesible la feria al público y cómo valora la evolución de la plaza desde que la gestionan?

Una de nuestras mayores ventajas es que disponemos de una plaza amplia (+11.000 localidades). Aquí apostamos por precios, ofertas y promociones para todos los bolsillos. El toreo no puede ser un espectáculo elitista. Cuando cogimos esta plaza estaba en la UVI y, gracias a Dios, la hemos conseguido recuperar. Aquí se trabaja todo el año, sabemos lo que quiere esta afición y, en la medida de lo posible, se lo damos.

¿Cómo ha evolucionado la política de abonos y promociones desde 2019 y qué resultados han obtenido en cuanto a asistencia y renovación del público?

El año pasado llegamos a los 1.000 jóvenes (35 euros las dos corridas), abono jubilado y este año abono niño por 20 euros (dos corridas), gran oferta. Desde nuestra llegada en 2019 se ha realizado una promoción especial para distintos colectivos, asociaciones y peñas taurinas (montante de 25 entradas, un 15% de descuento).

¿Qué dificultades han tenido que afrontar durante la confección de la feria, habida cuenta de la complejidad de contar con una serie de toreros por lo tardío de las fechas, y cómo han resuelto los cambios imprevistos en los carteles?

No ha sido una feria sencilla de compaginar. Nos ha costado, han existido varios cambios, por eso lo presentamos más tarde. Un torero muy importante nos mostró el interés de estar, pero finalmente nos hizo ver que terminaría su temporada en Madrid. Eso nos obligó a rehacer los carteles y las ganaderías (habíamos cerrado hierros del gusto de ese torero). Pese a su ausencia (ojalá contemos con él en 2026), creo que la feria es muy interesante.

¿Cómo ha afectado la situación actual del campo bravo a la planificación de la feria y qué criterios han seguido para seleccionar las ganaderías?

El campo bravo vive una situación delicada por la escasez de toros. Es muy difícil comprar una corrida con tiempo, pedirle a un ganadero que la aguante a octubre es complicado. Nosotros lo solventamos muy bien, creo que los hierros son de primera fila. En 2024 fue un éxito, esperemos que este año se repita. Se ha reseñado una gran corrida de Victorino. El 12, al no poder sacar una corrida completa ni un desafío, apostamos por tres hierros como son Garcigrande, Jandilla y Juan Pedro Domecq.

Para el festejo del día 12 hay tres hierros reseñados, ¿se sortean los animales o por el contrario cada espada ha elegido los suyos?

Hasta que no se embarquen los toros no sabremos la cantidad de animales que traerá cada hierro, y me explico. Inicialmente la idea es que sean dos de cada ganadería, pero lo mismo se lidia un animal de una y tres de otra. Lo que quiero dejar claro es que con esta fórmula nos garantizamos seis toros como merece Jaén. Los toreros no traen sus toros bajo el brazo, se va a sortear. Cuando llegue el momento se decidirá qué animales entran en cada lote.

¿Qué objetivos persiguen con la organización de festejos fuera del mes de octubre y qué balance hace de estos últimos años?

Desde que llegamos en 2019 intentamos dar toros fuera de feria, estamos en esa obligación. Este año hubo un festejo de rejones el pasado mes de junio (Virgen de la Capilla). Fue un festejo que resultó triunfal y contó con una buena asistencia de público. Un año contamos con la presencia de José Tomás, luego tuvimos el debut de Victorino en esta plaza… Creo que el paso adelante dado por esta empresa en la recuperación de los toros fuera de octubre es importante.

¿Qué ideas manejan para la temporada 2026 y cómo valoran la posibilidad de incorporar festejos menores al calendario de la plaza de Jaén?

Primero queremos acabar la edición de 2025 que todavía no ha comenzado, pero para 2026 intentaremos hacer algo bonito. Estamos convencidos de que dar toros en junio es positivo para esta plaza. Respecto a poder anunciar festejos menores (novilladas con y sin picadores), estamos abiertos a cualquier tipo de fórmula, ya sea en el Circuito de Novilladas de Andalucía o en el de las Escuelas Taurinas.